La Bruneta le decía que se veía mas joven y que se comprara unos lentes de contacto en vez de sus BInoculares potos de botella, pero en la oficina se reían de él, diciendo que ahora parecía un BIsexual o macho BIvalente y eso lo puso furioso.
Su amigo BIckford lo invitó a jugar BIllar para olvidar el mal rato de la oficina y taco en mano se dispusieron a jugar una mesita. Bruneta y BIBI, miraban entretenidas tomándose una BIlz y las carambolas iban y venían, hasta que en un momento Peripecio decidió hacer saltar la bola blanca para hacerse el experto frente a las chicas y ahí fue cuando se le enredó el peluquín en el taco, y volando por los aires, fue a dar sobre las piernas de la BIBI, que lucia una minifalda espectacular.
El momento fue entre bochornoso y divertido, ellas se reían de Peripecio y ellos de la BIBI…
Felices partieron a la costa, donde quedaron locos con el desfile de autos antiguos, los fuegos artificiales del 17 en Valparaíso, el 18 en Viña, ¡mejor que año nuevo!, los viva Chile espontáneos del pueblo, el desfile de barcos de Concón al puerto el día Lunes, las acrobacias de los halcones, los vendedores de volantines y palmeras, los tacos, las fondas, los viva Chile, los anticuchos, los salu compadre!, los tiquiti quití , mas tacos. Si hasta el himno cantó la gente mirando pa´rriba y a los que no cantaban se le cayó la baba admirados por un nuevo fuego de artificio que parecía trompo.
A Bruneta se le vió emocionada pensando en su padre aviador cuando se dibujo una estrella con las estelas de los aviones sobre El Baron… Mucho de todo esto, fue como en cámara lenta, como el desfile de la flota de la Armada y otras cosas fueron mas bien rápidas, como las borracheras, los Giles que se caían haciendo piruetas en motos acuáticas en Reñaca, sobre todo como se acabo la plata y las tarjetas de créditos se achurrascaban de tanto pasarlas en las churrasquerias !!!
Ya de vuelta de las fiestas del Bicentenario, que duraron como una semana, Don Peripecio fue encomendado para comprar la rotula del Aveo del Contador. I-phone en mano busco en Google: “repuestos de Chevrolet”, y entre varios resultados el buscador le señaló en el mapa con una banderita, la calle Republica 146.
En su antiguo BIscayne de los años 60, heredado de su padre llegó al local que lucia en la puerta el sello de “Empresa asociada a CAREP”, que a él tanta confianza le daba.
Ahí el vendedor le explicó que una rotula genuina con el logo azul de GM en la cajita, cuesta $18.000 y la que ellos importan directo de la fabrica CTR de caja roja, cuesta menos de la mitad, o sea $8.900.
- Claro- dijo Peripecio- la genuina es mejor, es GM. La otra quien sabe cuanto durará por eso es mas barata y como lo barato cuesta caro….
- No, le dijo el vendedor, para serle honesto Señor, es la misma pieza, es decir, es original, porque GM se la compra a CTR.
- No entiendo- agregó- ¿y porque es más barata, si es igual?
- La genuina tiene más intermediarios: de CTR a GM, de GM a su red de concesionarios, de la red al consumidor. En cambio esta otra, nosotros la importamos y vendemos directo…
- ¿Seguro que la única diferencia es el envase? – insistió y las miró con lupa y hasta fotos les sacó –
-
¡Escogió la Roja y se fue bi-feliz ¡
En esta foto la rótula inferior genuina de un Chevrolet AVEO, fabricada por CTR para General Motors, se vende en el comercio a un precio de $18.000.-
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